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El aumento en el precio de servicios de aseguradoras para los vehículos de carga, ha venido a sumarse a los retos que enfrentan los transportistas hoy en día, incremento que puede aligerarse con una administración de riesgos más eficiente.

Daniela Rodríguez Pelayo

El alza en los robos al autotransporte de carga ha traído consigo un aumento en el costo de las pólizas de seguros. De acuerdo con Luis Velázquez, directivo de Inno­vazione, ­–empresa especializada en la materia–, este ajuste obedece a que en los últimos siete años las aseguradoras en México han mantenido una guerra de precios por ganar participación de mercado, hasta que hace unos meses se dieron cuenta de que ya no era posible mantener las mismas tarifas, pues los equipos de autotransporte y refacciones han incrementado sustancialmente su valor por la escalada en el tipo de cambio.

“Al considerar al autotransporte como un ‘mercado de alto riesgo’, algunas aseguradoras han optado por retirarse de este sector”, precisó Rogelio Montemayor, Presidente de la Cámara Nacional del Autotrans­porte de Carga (CANACAR). Dicha información fue confirmada por el directivo de Innovazione, quien ma­nifestó que la oferta de aseguradoras de equipo de transporte ha disminuido de 14 a solo tres empresas: Quálitas, Axa y Atlas.

El entrevistado reconoció que hay algunas aseguradoras más peque­ñas que siguen participando; no obstante, exigen un mayor número de trámites para realizar los pagos en lapsos ma­yores y con menos garantías.

Al respecto, Luis Álvarez, Director General de Daños de la Asociación Mexicana de Instituciones de Se­guros (AMIS), declaró que en efecto hay empresas que han decidido retirarse del sector autotransporte o siguen ofreciendo sus servicios, pero de forma más cautelosa.

“No se puede hablar de un aumento generalizado en el precio de las pólizas, pues el incremento va en función del índice de siniestralidad de cada empresa”, precisó Álvarez.

De acuerdo con su testimonio, las compañías que tienen una cultura de prevención arraigada, no han padecido incrementos drásticos en sus planes de seguro, contrario a las empresas o microempresarios que operan sin poner en práctica medidas de seguridad vial y de protección a la integridad de sus operadores, uni­dades y carga que transportan.

En contraste con la visión del directivo de la AMIS, el gremio transportista alza la voz y confirma que aun las empresas con experiencia en materia de seguridad vial y prevención, han experimentado un alza en el costo de sus pólizas, el cual va del 30 al 100 por ciento.

Al respecto, Gabriel Gamez, Vicepre­sidente de la Comisión de Seguridad de la CANACAR, explicó que el aumento mínimo de las pólizas asciende a un 30%, esto en el caso de contar con una política eficiente de gestión de riesgos.

Ante la imposibilidad de prescindir de un seguro vehicular por disposición de la Secretaría de Comuni­­ca­cio­nes y Transportes (SCT), los transportistas deben cumplir con esta responsabilidad y asegurar sus uni­dades, mínimo con una cobertura limitada, es decir, que incluya robo total y daños a terceros.

Factores a considerar al contratar una póliza

Con base en su experiencia como re­presentante de la CANACAR y al frente de la operación de Autotrans­portes DAST, Gamez reconoce que, aunque una póliza de cobertura limitada permite cumplir con la obli­gación establecida por la SCT, al final puede acarrear más gastos en caso de un accidente, pues tan solo la contratación de una grúa puede alcanzar incluso los 100,000 pesos. “Un accidente puede acabar con una micro o pequeña empresa”, advirtió.

Su recomendación es hacer un análisis detallado de los alcances en prevención de cada empresa, llevar una estadística de los siniestros, tomar en cuenta los riesgos de cada ruta y de la mercancía a transportar para saber cuál es el tipo de póliza que se ajusta mejor a la operación.

Es necesario ser muy crítico a la hora de evaluar el índice de siniestralidad de la empresa, y buscar las alternativas que existen para re­forzar los puntos débiles. “Si tu pro­blema son los accidentes, es preci­so reforzar la capacitación de los ope­radores, ofrecer cursos de manejo a la defensiva, aplicar controles de ve­locidad y establecer horarios de des­canso cada determinado número de horas. Si la siniestralidad es elevada por la cantidad de robos, la clave está en poner en práctica medidas de prevención como deli­mitar zonas de riesgo, restringir horarios de circulación y viajar en convoy, por mencionar algunas”, aconsejó.

Benjamín Morales, Gerente Co­mer­cial de Innovazione, agregó que si una empresa se sabe muy madura en materia de seguridad vial, es posible limitar la cobertura de sus pólizas para reducir el costo de las mismas. Mediante el pleno conoci­miento de la operación de cada compañía, se pueden ir configurando las pólizas a la medida de sus nece­sidades y eliminar rubros que no tengan relevancia en su actividad.

Prevenir para ahorrar

“Lo que no inviertas en prevención lo vas a pagar en póliza”, apuntó Benjamín Morales, quien reconoce que este factor es de gran relevancia para reducir el índice de siniestralidad de las empresas y, por ende, el costo de las pólizas.

Explicó que una medida para disminuir el índice de robos y accidentes en las empresas, es la conformación de un Departamento de Seguridad Vial, a través del cual se elabora una base de datos propia, con estadística de accidentes, robos, personal involucrado, tipo de mercancías transportadas, zonas en las que han ocurrido los atracos y hora­rios de riesgo.

El objetivo, dijo, es que con base en esta información, se puedan ha­cer correlaciones de los factores que han incidido en los robos y actuar en consecuencia para corregirlos.

El representante comercial de Inno­vazione destacó la importancia de crear un Comité de Seguridad que trabaje en la generación y posterior vigilancia de un manual que incluya las medidas de seguridad que debe poner en práctica cada colaborador de la empresa para evitar ser víctima de la delincuencia.

Añadió la necesidad de establecer pro­tocolos de actuación en caso de ries­go, capacitar al personal operativo y administrativo para fomentar la to­ma de decisiones que abonen a la prevención de los delitos, y mante­ner una estrecha comunicación con to­das las áreas de la empresa para hacerlas partícipes de estas políticas y motivarlas a llevarlas a la práctica.

TyT