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Miguel Elizalde compartió los temas de mayor relevancia en la agenda de la asociación que preside.

Oliverio Pérez Villegas

Miguel Elizalde, Presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT)

Tras la incertidumbre desatada por el nuevo inquilino de la Casa Blanca que mantiene los ojos del mundo pendientes de sus decisiones, Miguel Elizalde, Presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), declaró que hoy más que nunca es momento de fortalecer el mercado interno, pues de acuerdo con sus estimaciones, México tiene potencial para comercializar alrededor de 60,000 vehículos pesados al año.

Al preguntarle sobre la forma de alcanzar estas cifras, comentó que la medida que siempre ha privilegiado para cumplir este objetivo es el impulso a la renovación vehicular, lo cual será posible deshaciéndose de las unidades obsoletas e incentivando la compra de equipos nuevos o seminuevos en óptimas condiciones.

La fórmula para llevar el Programa de Renovación Vehicular a un mayor número de micro y pequeños empresarios se basa en: chatarrización, financiamiento y capacitación/profesionalización, señaló el entrevistado.

Precisó que en la actualidad existe un universo de 150,000 vehículos a chatarrizar en México, lo que significa que anualmente deberían ser destruidos alrededor de 15,000. No obstante, señaló que el Programa de Renovación vigente aún presenta obstáculos que ponen freno al desarrollo de estos objetivos.

Elizalde explicó que el hecho de limitar a 3,000 el número de unidades a chatarrizar para las flotas con más de seis camiones, representa un candado para la renovación, al igual que la exclusión de las placas estatales de este programa y al requisito de que los vehículos a destruir deben estar al día con los requerimientos ambientales y físico-mecánicos vigentes.

En referencia a este último punto, el representante de las armadoras en México manifestó que resulta ilógico el hecho de querer chatarrizar una unidad que está en regla con las regulaciones actuales, y es por ello que considera necesario contar con mayor apertura y flexibilidad por parte de las autoridades.

El siguiente eslabón de la cadena

Una vez destruido el vehículo, Miguel Elizalde reconoce que el estímulo recibido es inferior a la cantidad que se requiere para la adquisición de un vehículo nuevo o seminuevo. Por tanto, estima que el siguiente paso debe ser el acceso al financiamiento, el cual tendría que basarse en condiciones preferenciales para las micro y pequeñas empresas, así como en la reducción de trámites para su obtención.

El entrevistado manifestó que las financieras de las armadoras destacan por las condiciones favorables en materia crediticia; no obstante, agregó que es necesario que la banca de desarrollo también haga su labor y aminore el impacto de las tasas de interés.

Incentivos a la vista

Para que la renovación vehicular sea una realidad, el directivo reconoce la necesidad de contar con los estímulos pertinentes. Al respecto, trajo a colación las medidas anunciadas por la Presidencia de la República ante el gasolinazo, entre las cuales se encuentra la de incentivar esquemas de financiamiento para los  microempresarios, iniciativa que se suma a la de mantener la deducibilidad de los combustibles y al proyecto de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), enfocado en fomentar la compra de vehículos a gas natural.

En su opinión, esta última medida podría tener mayor alcance si se hace extensiva a vehículos híbridos, eléctricos o a diesel con tecnologías más limpias.

Otro de los incentivos que el entrevistado tiene en el radar, es el otorgado por el Fondo Nacional de Infraestructura (FONADIN) para mejorar la infraestructura de los sistemas BRT, medida que a su juicio cobraría mayor relevancia si se incluyeran los vehículos que transitan por estas vías, así como el resto de autobuses urbanos, de lo contrario: “Tendríamos caminos de primera con unidades de segunda”.

Sin incentivos no hay renovación

A lo largo de esta charla, el Presidente de la ANPACT dejó en claro la importancia que tienen los incentivos para promover la renovación del parque vehicular y, por ende, para impulsar al mercado interno. Sin embargo, éstos cobran aún mayor relevancia al tocar el tema de los nuevos estándares en la regulación de emisiones, pues el incremento que experimentarán las unidades para ir en línea con las nuevas tecnologías, solo podrá solventarse mediante estímulos otorgados por las autoridades.

Una vez con la disponibilidad de diesel UBA a nivel nacional, prevista para enero de 2019, la Asociación a su cargo pugnará por un periodo de transición para incorporar las nuevas tecnologías, así como un paso inicial hacia EPA 07 y Euro V para posteriormente dar el salto a EPA 10 y Euro VI, precisó el entrevistado.

Cada uno de estos pasos implicaría     un incremento de alrededor del 10% en el precio de las unidades, motivo por el que enfatizó la necesidad de contar con incentivos para lograr una transición exitosa que verdaderamente traiga consigo la renovación de unidades y no desencadene la importación de vehículos usados de Estados Unidos.

Para mantener un mercado interno fuerte hay que extender la renovación vehicular a todos los estados

Profesionalización

Reconocida como el tercer elemento para fomentar el Programa de Renovación Vehicular, la profesionalización es un aspecto que la ANPACT, en conjunto con las principales cámaras de la industria, ha impulsado entre los micro y pequeños empresarios del transporte, pues de acuerdo con su dirigente, representa la solución de fondo para elevar la productividad del sector.

Conforme a su testimonio, la capacitación es el medio de acceso a las herramientas requeridas para administrar una empresa y hacerla rentable a través de una adecuada estructura de costos y de la plena conciencia de que mediante una flota joven y en buenas condiciones, es posible incrementar la productividad.

Propuestas a bordo

Tras la reunión realizada con organizaciones civiles, líderes de la iniciativa privada y representantes estatales durante el Encuentro Nacional de Autoridades de Transporte, Miguel Elizalde compartió con TyT cinco de los principales acuerdos alcanzados en pro del transporte público.

La principal conclusión fue la de crear un fondo nacional para la renovación de vehículos urbanos. El segundo punto se basa en establecer una política tarifaria que incluya a todas las entidades, en la cual se establezcan los criterios para fijar una tarifa dinámica. “Hay que apostar por nuevos esquemas que respondan a las transformaciones del entorno”, precisó.

Como tercer punto, habló de la necesidad de ofrecer incentivos para la calidad en el servicio del transporte público, relacionado con el cuarto acuerdo: promover un marco regulatorio adecuado que sume beneficios a la movilidad en las ciudades.

Finalmente, el quinto aspecto aborda la profesionalización, es decir, mudar del esquema de hombre-camión a empresas de transporte en las que se fomente la regularidad, la cultura del servicio hacia los pasajeros, la seguridad vial y la reducción de contaminantes a través de un uso más eficiente del diesel.

A la expectativa del TLCAN

Respecto a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), es necesario esperar a ver qué decisión toma Estados Unidos, precisó Elizalde. De momento, los tres panoramas que prevé son: que se hagan modificaciones en beneficio de los tres países participantes, que la nación estadounidense se retire o que la administración de Trump tome la decisión, no solo de abandonar el tratado, sino incluso la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Expresó que la integración de México, Canadá y Estados Unidos en lo referente a la industria automotriz es tan sólida, que una decisión mal tomada puede repercutir en las tres naciones. No obstante, añadió que no es tiempo de especular, sino una vez teniendo una resolución, actuar en consecuencia.

Por lo pronto, los esfuerzos deben enfocarse en fortalecer el mercado interno y apostar por las exportaciones a los países con los que ya existe un lazo comercial: Canadá, Perú, Chile y Colombia y, en la medida en que esto convenga a los intereses globales de las armadoras con presencia en México, voltear la vista hacia otros mercados.

Con la mira en Expo Transporte

A poco más de 200 días del banderazo de salida de la decimoséptima edición de Expo Transporte, Miguel Elizalde se dice sorprendido por la buena respuesta que ha tenido por parte de los expositores para reservar sus lugares en la muestra, pues dos de los tres salones de exhibición ya se encuentran a su máxima capacidad.

La muestra de este año, a celebrarse del 15 a 17 de noviembre, espera la visita de más de 40,000 personas en los días de exhibición, en los que los socios de la ANPACT se preparan para rebasar lo presentado en ediciones anteriores y dar a conocer sus últimas tecnologías.

Anticipó que la novedad para este año serán los encuentros de negocios a través de una plataforma digital, mediante la que los interesados podrán ponerse en contacto con los expositores.

TyT